Por primera vez, una figura del establishment europeo, de la Iglesia, se ha pronunciado contra un argumento que exonera al ISIS y que esgrimen con frecuencia las élites políticas y culturales de Occidente. El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, dijo en Francia el 17 de noviembre que, para hacer frente a la violencia de motivación religiosa en Europa,es necesario distanciarse de la postura, cada vez más popular, que es decir que el ISIS «no tiene nada que ver con el islam» (…). Hasta que los líderes religiosos no den un paso y asuman la responsabilidad por los actos de quienes hacen cosas en nombre de su religión, no veremos ninguna resolución».
El arzobispo Welby dijo también que «es muy difícil entender las cosas que impelen a las personas a cometer algunos de los terribles actos que hemos visto en los últimos años, a no ser que se tenga cierto conocimiento religioso».
«El conocimiento religioso» ha escaseado, especialmente en el continente europeo. Sin embargo, en todo Occidente, personas con poco o ningún conocimiento del islam, incluidos líderes políticos, periodistas y creadores de opinión, se han convertido de repente en «expertos» en el islam y el Corán, asegurando a todo el mundo que el ISIS y otras organizaciones terroristas similarmente genocidas no tienen nada que ver con la supuesta «religión de paz», el islam.
Llama la atención, por tanto, oír por fin una voz del establishment, especialmente un hombre de la iglesia, que se opone, aun guardando cautela, a esta postura curiosamente uniforme (y estupefacientemente desinformada) sobre el islam. Hasta ahora, las iglesias del establishment, a pesar de las atrocidades cometidas por musulmanes contra cristianos, han estado excesivamente ocupadas con el llamado «diálogo interreligioso». El papa Francisco incluso ha regañado a los europeos por no ser más obsequiosos con los migrantes que han saturado el continente, preguntándoles:
¿Qué te ha pasado a ti, a la Europa del humanismo, a la defensora de los derechos humanos, la democracia y la libertad? (…) Madre de grandes hombres y mujeres que dedicaron e incluso sacrificaron sus vidas por la dignidad de sus hermanos y hermanas?
(El papa, antes de pedir retóricamente a los europeos que sacrifiquen sus vidas por sus «hermanos y hermanas» migrantes, quizás debería preguntarse cuántos de esos migrantes musulmanes en Europa consideran a los europeos sus «hermanos y hermanas»).
Son unas declaraciones sobre el islam especialmente significativas en boca del arzobispo de Canterbury, el máximo obispo y líder de la Iglesia Anglicana, y jefe simbólico de la Comunión Anglicana, compuesta actualmente de unos 85 millones de miembros en todo el mundo, siendo la tercera mayor confesión mundial.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby (izquierda), declaró recientemente que el tratamiento de la violencia de motivación religiosa en Europa «requiere apartarse del argumento, crecientemente popular, de que el ISIS ‘nada tiene que ver con el islam’ (…) Hasta que los líderes religiosos no asuman responsabilidades por las acciones de aquellos que hacen cosas en nombre de sus religiones, no habrá solución» (Imagen: Foreign and Commonwealth Office).
Hace tan sólo un año, en unas declaraciones sobre las masacres de París, el arzobispo siguió la ortodoxia políticamente correctapontificandoque «la perversión de la fe es uno de los aspectos más acuciantes de nuestro mundo actual». Explicó que los terroristas del Estado Islámico habían distorsionado su fe hasta el punto de creer que estaban glorificando a su dios. Desde entonces, es evidente que ha cambiado de opinión.
¿Puede alguien esperar que otros líderes de la iglesia y la política presten atención a las palabras del arzobispo Welby, o seguirán siendo convenientemente ignoradas? Es evidente que los líderes occidentales han escuchado de manera selectiva durante muchos años, e ignorado las verdades que no se ajustaban al «relato» que a los políticos les gusta imaginar, especialmente cuando las dicen los auténticos expertos sobre el islam. Cuando, en noviembre de 2015, el jeque Mohamed Abdulá Nasr, experto en ley islámica y licenciado por la Universidad Al Azhar de Egipto,explicópor qué la prestigiosa institución, que forma a alumnos en la corriente mayoritaria del islam, se negó a denunciar al ISIS por ser antiislámico, nadie lo escuchó:
El Estado Islámico es un subproducto de los programas de Al Azhar. Así que, ¿cómo puede condenarse a sí misma por antiislámica? Al Azhar dice que debe haber un califato, y que es una obligación para el mundo musulmán. Al Azhar enseña la ley de la apostasía y a matar al apóstata. Al Azhar es hostil hacia las minorías religiosas, y enseña cosas como que no que no hay que construir iglesias, etc. Al Azhar defiende la institución de la yizia [tributo exigido a los no musulmanes]. Al Azhar enseña a lapidar a la gente. Así que, ¿cómo puede Al Azhar denunciarse a sí misma por antiislámica?
Tampoco los líderes occidentales escucharon cuandoThe Atlantic, que no es precisamente una cabecera anti establishment, publicó un estudio de Graeme Wood, que investigó a fondo al Estado Islámico y su ideología. Habló con miembros y reclutadores del Estado Islámico yconcluyó:
La realidad es que el Estado Islámico es islámico. Muy islámico. Sí, ha atraído a psicópatas y buscadores de aventuras, extraídos sobre todo de las poblaciones desafectas de Oriente Medio y Europa. Pero la religión que predican sus más fogosos seguidores se deriva de interpretaciones coherentes e incluso eruditas del islam.
En Estados Unidos, otra figura del establishment, Reince Priebus, presidente del Comité Nacional Republicano y jefe del gabinete entrante de Donald Trump, hizo hace poco unas declaraciones con un efecto parecido a las del arzobispo de Canterbury. «Claramente, hay algunos aspectos de esa religión que son problemáticos, y los conocemos: los hemos visto»,dijoPriebus al ser preguntado acerca de la opinión del asesor de Seguridad Nacional entrante, el exteniente general Michael Flynn, de que el islam es una ideología política que se oculta tras una religión.
En gran parte de la sociedad estadounidense, que Flynn opine que el islam es una ideología política se considera polémico, a pesar de que las doctrinas políticas y militares del islam, resumidas sucintamente en el concepto de yihad, se codifican en la ley islámica –la sharia–, y se encuentra en el Corán y las hadices. Los yihadistas que cometen atentados al servicio del ISIS, por ejemplo, sólo están siguiendo las órdenes del Corán: «Combate y mata a los no creyentes allá donde los encontréis» (9:5) y «Combátelos hasta que no haya más fitna [lucha] y se sometan todos a la religión de Alá» (8:39).
La pregunta es, entonces, si otras figuras del establishment también reconocerán lo que alguien como el arzobispo Welby –y elextraordinariopresidente de Egipto, Abdel Fatah el Sisí– han tenido por fin el coraje de decir en público: que si uno insiste en seguir siendo un «analfabeto religioso», entonces es imposible resolver el problema de una violencia de motivación religiosa.
«Mi amor para todos los que dicen NO, todos los que se levantan contra el cambio de pueblo y de civilización, todos los que rechazan la conquista y la colonización de Europa, así como la anunciaron, cada cual por su lado, Houari Boumédiène y Vladimir Putin, sin olvidar esos otros visionarios que fueron Enoch Powell y Jean Raspail.
Hoy una gran esperanza se levanta en el este, se llama Pegida, y tenemos con nosotros a una embajadora que saludamos como la mensajera de la primavera de los pueblos: Melanie Dittmer.
Siempre he pensado que el problema que se nos plantea, y que es el más grave que podamos tener (ya que se trata de la misma existencia y supervivencia de nuestra civilización) sólo puede tener una solución europea, dentro de la unión de todas las naciones y todas las culturas de tradición celta, greco-latina, cristiana por supuesto y también librepensadora.
Europa está colonizada, y lo está mucho más gravemente, mucho más irremediablemente, si no hacemos nada, que lo que ella misma colonizó en su día.
Pero vamos a combatir, lo estamos haciendo ya. La lucha anticolonialista ya ha comenzado, en el camino de Pegida. Un Frente de Liberación Nacional, sección francesa de la Internacional Pegidista, ha comenzado la resistencia. Si queréis ayudarla, ofrecedle vuestras competencias, eventualmente algo de vuestro dinero, pero sobre todo vuestra presencia, vuestra visibilidad, vuestros mensajes, todo aquello que puede conducir a la proliferación del frente del rechazo.
Nuestro modelo Pegida tiene a su vez un modelo, el que derribó el Muro de Berlín y abatió el Telón de Acero. Hoy al igual que hace 25 años el adversario parece todopoderoso, el régimen soviético entonces, hoy el poder remplacista, el que promueve la Gran Sustitución, la intercambiabilidad general del hombre y de todo, bajo la excusa de la multiculturalidad y la convivencia. Pero esos dos poderes, el que cayó hace un cuarto de siglo y el que enfrentamos hoy, tienen la misma debilidad que hace que puedan derrumbarse de un día para otro. Están hechos de mentiras, saturados de falsedad hasta lo más profundo de ellos mismos, llenos del vacío de la ilusión fabricada. La verdad puede reducirlos en cenizas al menor golpe, como los colosos de cartón-piedra que son.
La verdad es queno hay multiculturalismo sino una deculturación general que conduce al atontamiento masivo, a la subida de la violencia, al retorno al salvajismo de la especie.
La verdad es queno hay convivencia sino una conquista colonial en curso en la cual nosotros somos los indígenas colonizados y cuyo instrumento es la cantidad, por supuesto, la sustitución demográfica, pero también la permanente delincuencia, el vandalismo de todos los días, las molestias cotidianas que vuelven la vida imposible a la gente, o la espantosa barbarie de la que hemos sido testigos hace poco.
La verdad es que no hay pueblo. Un pueblo es todo lo contrario de lo que hay. Hay comunidades que se disputan cada día más abiertamente un territorio, un territorio sobre el cual esas comunidades tan distintas tienen derechos muy desiguales. Es por eso que hablo sin rodeos de guerra colonial, o para decirlo mejor desde nuestro punto de vista, de guerra anticolonial, de lucha anticolonialista.
La esperanza es que la verdad sea suficiente para derribar las murallas, como hace 25 años. Y en esa verdad incluyo la ley, las victoria electorales, los cambios políticos, la constatación de la incompatibilidad de caracteres, el gentlement agreement, el divorcio (tanto más fácil de obtener como que nunca hubo consentimiento en ese matrimonio…), la remigración, el control efectivo del Mediterráneo…
Si la verdad no fuera lo suficientemente fuerte como para alcanzar esos resultados, no habría más alternativa que la sumisión o la lucha armada. La primera ya ha comenzado. La segunda también, y no la hemos iniciado nosotros.»
ENGLISH VERSION
«My love for all those who say NO, all those who stand up against the change of people and civilization, all who reject the conquest and colonization of Europe, as well as announced by Houari Boumédiène and Vladimir Putin, not forgetting those other visionaries who were Enoch Powell and Jean Raspail.
Today a great hope rises in the east, is called Pegida, and we have an ambassador with whom we salute as the messenger of the spring of the peoples: Melanie Dittmer.
I have always thought that the problem that we face, and that is the most serious we can have (since it is the very existence and survival of our civilization) can only have a European solution, within the union of all nations And all cultures of Celtic, Greco-Latin, Christian tradition of course and also freethinker.
Europe is colonized, and it is much more seriously, much more irremediably, if we do nothing, than what it itself colonized in its day.
But we are going to fight, we are already doing it. The anti-colonialist struggle has already begun, on the road to Pegida. A National Liberation Front, a French section of the Pegidist International, has begun resistance. If you want to help her, offer her your skills, possibly some of your money, but above all your presence, your visibility, your messages, everything that can lead to the proliferation of the front of rejection.
Our model Pegida also has a model, which knocked down the Berlin Wall and struck down the Iron Curtain. Today, just as 25 years ago, the adversary appears to be all-powerful, the Soviet regime at that time, today the remplacist power, which promotes the Great Substitution, the general interchangeability of man and everything, under the excuse of multiculturalism and coexistence. But those two powers, the one that fell a quarter of a century ago and the one we face today, have the same weakness that makes them fall overnight. They are made of lies, saturated with falsehood to the depths of themselves, filled with the emptiness of fabricated illusion. The truth can reduce them to ashes at the slightest blow, as the stone-cardboard colossi they are.
The truthis that there is no multiculturalism but a general acculturation that leads to massive stun, to the rise of violence, to the return to savagery of the species.
The truth is that thereis no coexistence but an ongoing colonial conquest in which we are colonized Indians and whose instrument is the amount, of course, demographic substitution, but also the permanent crime, vandalism of every day, discomfort Everyday life that makes life impossible for people, or the frightful barbarity we have witnessed recently.
The truth is that there are no people. A village is the opposite of what there is. There are communities that are more and more openly disputing a territory, a territory on which these very different communities have very unequal rights. That is why I speak bluntly of colonial war, or, to put it better, from our point of view, of anti-colonial war, of anti-colonial struggle.
The hope is that the truth will suffice to bring down the walls, as it did 25 years ago. And in that truth I include the law, the electoral victories, the political changes, the verification of the incompatibility of characters, the gentlement agreement, the divorce (so much easier to obtain as there was never consent in that marriage …) The effective control of the Mediterranean …
If the truth were not strong enough to achieve those results, there would be no alternative but to submission or armed struggle. The first has already begun. The second also, and we have not initiated it. «
«El Islam dominará el mundo» ¡¡Y LO DICEN EN SERIO, NO ES ALGO FOLKLORICO DE CUATRO BARBUDOS MAJARAS»!!!
El multiculturalismo, basado en la convivencia de distintas culturas sin tener que renunciar a sus creencias y costumbres, está fracasando en Europa y el mundo. Las culturas, cuando son impermeables y hostiles, como el Islam, en lugar de convivir acumulan rechazo y odio y se convierten en caldo de cultivo para el fundamentalismo y la violencia.
Francia, Bélgica e Inglaterra, con sus guetos musulmanes conflictivos, y, en menor medida, Alemania y España, demuestran que el multiculturalismo está fracasando estrepitosamente. Las culturas no conviven en paz y el Islam está demostrando que es una doctrina pétrea e impenetrable, reacia a mezclarse con cualquier otra y generadora de odio, intransigencia y fundamentalismo.
Las tesis multiculturales, engendradas por la izquierda, partidaria de mezclarlo todo para homogeneizar e igualar, están en bancarrota y generando un rechazo que conduce al odio intercultural y, en muchos casos, a la xenofobia y la violencia. El odio terrorista a la cultura occidental y el auge de la extrema derecha y del rechazo a los musulmanes son dos fenómenos paralelos en Europa.
Las tendencias fundamentalistas, dentro del Islam, crecen de manera preocupante. El fundamentalismo es un fenómeno religioso que experimenta un alarmante proceso de expansión, impulsado por una explosiva mezcla de frustraciones: la pobreza, la desestabilización y la guerra en el mundo musulmán, la lucha entre sunies y chiies, el dinero del petroleo, que se está empleando en fomentar la violencia y el terrorismo, y la incapacidad de los inmigrantes musulmanes y de las culturas cristianas europeas receptoras de integrarse y fundirse.
Ante ese fracaso, no queda otro remedio que cambiar las reglas del juego y adoptar medidas defensivas en Europa, donde la cultura autóctona corre el riesgo de ser suplantada por la musulmana, que no se integra y que se mantiene activa y desafiante en guetos llenos de niños y jóvenes, pobreza, desempleo y odio.
¿La solución? Básicamente dos: mayores esfuerzos por la integración y controles a la inmigración, que deberá filtrar en adelante a los que llegan para que no entren delincuentes, terroristas y agitadores, al mismo tiempo que se expulsan a los imanes profetas de la violencia y la revancha y se cierran las mezquitas que funcionan más como escuelas de odio que como lugares de oración.
Detrás de todo el problema de la integración y del fracaso multicultural está el terrorismo como recurso del extremismo islámico. Ese fenómeno apenas ha empezado porque, aunque ha alcanzado una violencia suicida sin precedentes y ya no respeta los dos tabúes que lo frenaban, la vida propia y destrucción masiva, todavía no ha traspasado las fronteras de los ataques químicos, bacteriológicos y nucleares, capaces de producir oleadas de pánico desconocidas y reacciones altamente violentas en las culturas de acogida.
La reciente advertencia de Manuel Valls, primer ministro francés, de que Francia teme ataques químicos y bacteriológicos por parte del terrorismo, representa un paso enorme en la escalada del terror, que, si se produce, generará pánico, odio y reacciones terribles entre los europeos atacados.
El pensador Hala Mustafa cree que el resurgimiento del Islam fundamentalista está ligado al fracaso de la modernización política y económica de la mayoría de las sociedades islámicas y el fracaso también de los movimientos populares de izquierda que se han desarrollado en el mundo islámico. Si a todo ese descontento y frustración se le añade la guerra, promovida por las potencias occidentales, contra países musulmanes estables, aunque sometidos a dictaduras, como Irak, Libia, Túnez y Siria, entonces ya tenemos listo el cóctel explosivo.
Europa y Occidente entero tienen que prepararse para dramas mucho peores que los padecidos hasta ahora, dramas provocados por un terrorismo espoleado y desesperado por la pobreza, por la paga mercenaria en petrodólares, por el fracaso de sus países de origen, por la desigualdad y por la intransigencia de una religión que, aunque digan que es pacífica, es la única del mundo que alienta el exterminio de los infieles y promete el paraíso a los asesinos.
Un programa especial del mejor canal de noticias, Fox News, atacando al islam con sus propias palabras.
Donde se expone la verdad del islam y su objetivo de dominio mundial.
Está dividido en cuatro videos, supongo que será por temas de Youtube, pero es interesante ver los cuatro, yo los coloco en pefecto orden.
Y A VER SI NOS ENTERAMOS, cansa repetir y repetir esto pero no hay mas remedio, NO EXISTE UN ISLAM MODERADO, UN ISLAM CIVILIZADO QUE PUEDE CONVIVIR EN DEMOCRACIA, EN PAZ Y RESPETANDO EL RESTO DE LAS CREENCIAS (O NO CREENCIAS), NO, NO EXISTE, SOLO HAY UN ISLAM Y SU FIN ES IMPONER HASTA LOS MÁS RECÓNDITOS RINCONES DE LA TIERRA LA SHARIA O LEY ISLÁMICA, ley por cual, OLVIDEMOSNOS DEFINITIVAMENTE DEL LIBRE ALBEDRÍO, DE LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN, DE LA LIBERTAD EN FIN. LOS LIBROS QUE EL CONSEJO ISLÁMICO CONSIDERE BLASFEMOS, NO SE PODRÁN PUBLICAR Y CON LA POSIBILIDAD ADEMÁS DE EJECUCIÓN (ES DECIR, ASESINATO) DEL AUTOR Y DE QUIEN O QUIENES LOS DIFUNDAN, IGUAL OCURRIRÁ CON LA MÚSICA Y CON MUCHAS OTRAS COSAS, COSAS COTIDIANAS PARA NOSOTROS Y QUE HA COSTADO MUCHO CONSEGUIR porque, efectivamente, allá por la edad media y los siglos XV Y XVI, con la Inquisición y otras autoridades de la época, se hacía también, ESO NO SE NIEGA pero LA DIFERENCIA ESTRIBA EN QUE NOSOTROS HEMOS IDO SUPERANDO ESAS BARBARIES, AVANZANDO, PRO – GRE – SAN – DO (¿OS ENTERAIS «LERDO-PROGRES», PROGRESANDO Y NO LO QUE VOSOTROS CONSIDERAIS PROGRESO) MIENTRAS EL ISLAM Y SU MUNDO HAN PREFERIDO MANTENERSE EN LA MISMA BARBARIE QUE EL PROPIO «INVENTOR» DE ESTA DOCTRINA, UN SUJETO MUY POCO RECOMENDABLE.
Eso si, NO HAN RECHAZADO NUNCA EL QUE LES DEMOS TECNOLOGÍA PARA SUS FINES (el mismo petroleo en el que nadan ahora esos ricos emiratos del Golfo Pérsico, los Saudies y los Iranies, SI NO ES POR LOS OCCIDENTALES SEGURAMENTE TODAVÍA ESTARÍA BAJO TIERRA Y ELLOS PASTOREANDO CABRAS EN EL DESIERTO Y VIAJANDO EN CARAVANAS DE DROMEDARIOS) NI, POR SUPUETO, ARMAS DE ÚLTIMA VERSIÓN.
SUS MODOS TRAICIONEROS E HIPÓCRITAS SON LEGENDARIOS Y NO ES TEMA DE RACISMO NI XENOFÓBIA (acusación que además CAE POR SU PROPIO PESO POR LA SENCILLA RAZÓN DE QUE LA RAZA LA DAN LOS GENES Y MUSULMÁN, ISLAM, MAHOMETANO, etc., tiene que ver CON UNA DOCTRINA, UNA CREENCIA, UNA IDEOLOGÍA, y estas NO SON PROPIAS DE UNA RAZA, ETNIA O NACIONALIDAD, NO SE NACE SIENDO DE UNA CREENCIA O DE OTRA, en todo caso TE LO IMPONEN pero NO ES ALGO NATO), es que en realidad, ES UNA IDEOLOGÍA TOTALITARIA, DE ANULACIÓN DE LA INDIVIDUALIDAD DEL SER HUMANO CON OBJETO DE CONVERTIR A ESTE EN UN SIMPLE MIEMBRO, NO PENSANTE, DE UN REBAÑO.
NO es realmente una religión, ES UNA IDEOLOGÍA POLITICA DISFRAZADA DE TAL.
Y día a día, por mucho que se esfuerzan políticos, gobernantes, autoridades E INCLUSO LA PRENSA QUE DEBERÍA VELAR POR LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN, SALEN A LA LUZ SUS «MÉTODOS», LO QUE HACEN EN LOS COLEGIOS LOS NIÑOS MUSULMANES A LOS QUE NO LO SON, IMPIDIENDOLES COMER LIBREMENTE LO QUE QUIERAN, ENVENENAN PERROS, MONTAN TRIBUNALES ALTERNATIVOS NEGANDO LA AUTORIDAD DE LOS NUESTROS Y SE RIEN DE ESOS DERECHOS HUMANOS EN LOS QUE, CON ESA HIPOCRESÍA QUE LES CARACTERIZA, SE ESCUDAN AL MISMO TIEMPO CUANDO SE LES TRATA DE PONER FRENO, INVOCANDO ADEMÁS, SIEMPRE, COMO NO, EL GRITO DE «RACISTAS».
ESTE ENGAÑO TIENE QUE ACABAR Y HAY QUE PONER LAS COSAS EN SU SITIO Y A LOS POLÍTICOS HAY QUE HACERSELO VER TAMBIÉN Y QUE, DE UNA VEZ POR TODAS, CUMPLAN CON SU DEBER QUE, AL FIN Y AL CABO, SOMOS NOSOTROS Y NO ELLOS LOS QUE LES HEMOS PUESTO AHÍ Y POR QUIEN PRIMERO TIENEN QUE VELAR ES POR NUESTROS DERECHOS, NO POR LOS SUYOS.
Debe hacerseles ver también que, SI ESTOS SUJETOS LOGRAN SU OBJETIVO, SUS PROPIOS PRIVILEGIOS SE LES ACABAN DE UN PLUMAZO, en cuanto imperen leyes islámicas, ELLOS PASARÁN TAMBIÉN A FORMAR PARTE DEL REBAÑO DE SUJETOS NO PENSANTES QUE DICHA DOCTRINA BUSCA, que no crean que VAN A ESTAR A PARTIR UN PIÑÓN CON ELLOS REPARTIENDOSE «LAS GANANCIAS», LES DARÁN LA «PUÑALADA TRAPERA», OTRA COSA EN LA QUE, HISTORICAMENTE, SON AUTÉNTICOS MAESTROS.
Pierre Cassen, el 28 de marzo de 2012, habla del Congreso de la UOIF (unión de las organizaciones islámicas de Francia) que tenía que celebrarse (y se celebró) nueve días después (Viernes Santo de 2012) en Bourget (cerca de París). Al congreso fue invitado el jeque Yusuf al-Qaradawi, y esta es una de las razones por las cuales la izquierda «anti-racista» debería haber pedido la prohibición de dicho congreso.
Como es natural, NO SOLO NO LO HICIERON sino que siguen, erre que erre, llamandonos a los que si lo denunciamos «racistas» (insisto en que son además BURROS E IGNORANTES puesto que el Islam NO es una RAZA) e intolerantes.
¿Intolerantes? pues no se yo, a mi me parece QUE SON LOS ISLÁMICOS LOS INTOLERANTES Y NO NOSOTROS.
Por cierto, a gente como el concejal socialista y homosexualPedro Zerolo, el lobby gay y las feminazis, ¿cuando salen este tipo de sujetos diciendo lo que dicen, DONDE ESTAIS CAGAND…..ESCONDIDOS, EH?.
Y por poner un ejemplo más de como es esta gente, lo tenemos hasta EN EL FUTBOL, ahí está el famoso y supermillonario actual dueño del MÁLAGA C.F., Abdullah Bin Nasser Al-Thani, perteneciente a la familia real de Qatar y dueño y señor de compañias multimillonarias, el cual, sin embargo, tiene deudas contraidas con jugadorese impagos en traspasos. Y no esque le falte liquidez, no, este no es como otro que vino por aquí, este si es quien dice ser y tiene lo que tiene, MUCHA PASTA pero……QUIERE Y EXIGE QUE LAS COSAS SE HAGAN AL ESTILO ARABE, a el las leyes occidentales le traen sin cuidado, para el las cosas se hacen «como Alá manda» y ESO HAY QUE ACATARLO PORQUE ESTÁ POR ENCIMA DE CUALQUIER LEGISLACIÓN.
Valga esta última información que parece más de prensa deportiva para que quede constancia UNA VEZ MÁS de lo que es el mundo musulmán y lo poco que RESPETAN a quienes no somos como ellos.
Repito, y luego para los «progres», «sociatas» y demás «listillos», los intolerantes y racistas SOMOS NOSOTROS.
Esther, joven judía de 15 años. Su familia ha sido asesinada a manos de un sicario sarraceno, Muhamad Al Jaadi. Su casa y enseres arrasados y calcinados por el fuego. Ella, tras sufrir numerosas violaciones es conducida al harem del sultán Abu I Hassan (o Alí Muley Hacen), Allí tras dos años de vejaciones muere envenenada por la favorita del sultán, Zoraya, anteriormente noble castellana llamada Isabel de Solís. Tras una tortura agónica de golpes muy bien administrados para no dejar marcas evidentes le administró una onza de arsénico y acabó con ella.
EL PRESENTE Turquía 10 de Agosto 2004 D.C.
Helena, mujer cristiana de 24 años, acaba de ser madre hace escasamente cinco meses. Su familia, bebé incluido, ha sido víctima de un atentado perpetrado en un hotel de Estambul reivindicado por las Brigadas Abu Hafs Al Masri, una de las organizaciones de Al Qaida. Todos muertos excepto ella. Ha sido raptada y vendida a una red de prostitución en Dubai.Fallece víctima de Sida a los 29 años.
FUTURO INMEDIATO Barcelona, 10 de Diciembre año 42 T.A.I. (Tras el advenimiento del Islam) 2122 D.C.
Tres mujeres: Aaminah, Myriam y Marina, residentes en Barcelona, ciudad de Al Andalus. Procedentes de antiguas familias, musulmana, hebrea y católica respectivamente. El islam se ha instaurado en el mundo occidental y se prohibe y castiga profesar cualquier otra fe. La sharia es la única ley existente. Pero en el seno de algunas familias la tradición oral sobre otros modus vivendi del pasado aun sobrevive. Esas jóvenes tienen algo en común, las tres son esposas de un próspero empresario, Muhammad Saleem. A pesar de haber recibido educación superior muy esmerada, eso no ha sido óbice para que hayan sido adquiridas como esposas por el amo que las posee. Afortunadamente, dentro de su hogar del que apenas salen no son sometidas a una estricta vigilancia por el marido siempre ocupado.
FUTURO, 30 AÑOS DESPUÉS, 72 D.A.I, 2152 D.C.
Entre estas tres mujeres han traído al mundo diecisiete hijos. En secreto han ido imbuyendo en ellos el rechazo por el totalitarismo del islam. Eso sí, han puesto sumo cuidado en no hacerlo evidente a los ojos y oídos que les rodean.
FUTURO, 50 AÑOS DESPUES, 132 D.A.I., 2202 D.C.
Los descendientes de esas tres disidentes del islam ya son trescientos, cifra irrisoria para iniciar un levantamiento si. Pero trescientos fueron los soldados de las Termópilas y también con los que dispuso Pelayo para iniciar la Reconquista en la anterior invasión del territorio hispano. Cierto que pasaron siglos antes que los Reyes Católicos los expulsaran, pero el asturiano inicio la lucha.
Esta vez es distinto. El islam ha tomado el antiguo mundo occidental y no deja resquicio para ninguna libertad individual. Precisamente por eso, entre la población aunque en silencio recóndito por el miedo a las represalias, todavía bulle un grito callado de liberación.
Los descendientes de las tres esposas han sembrado la idea de un mundo distinto. han transmitido la posibilidad de vivir de otra forma, recuerdos de otros tiempos donde se permitía la libertad de pensamiento.
El islam se impuso por medio del terror, jamás por convencimiento. Y esos trescientos serán la simiente de la que germine la clandestinidad de nuevas generaciones disconformes que en silencio se alzarán un día con la misma táctica que ellos se impusieron…Conquistar con el vientre de sus mujeres, tener multitud de hijos y educarlos en la oposición. Se les preprará para que inicien una diáspora al estilo de los judios, diseminándose por todo el mundo, que es quizás la única forma de no desaparecer como entidad cultural y con suerte en años, un par de siglos ¿quién sabe? se levantarán en masa.
Y ya no se tratará de cometer de nuevo el error de expulsarlos como antaño, porque no habrá un reducto en la tierra que desee alojar de nuevo la semilla del mal, so riesgo de que vuelva a brotar. La misión será ERRADICARLOS como entidad.
Quizás esta vez sean las mujeres las impulsoras del cambio a traves de la transmisión de la cultura olvidada a los hijos, a fin de cuentas las tradiciones y los recuerdos… los cuentos proviene en su mayoría de la tradición oral de las madres.
Porque, hoy, en el presente todavía… si no tomamos medidas a tiempo para evitarlo solo quedará decir en breve…BIENVENIDOSS AL ISLAM!!
ISLAM – La apostasía (ridda), es decir, el abandono del Islam por un musulmán se considera un error gravísimo y una traición a la comunidad de los verdaderos creyentes, la umma, en la que sólo se puede entrar, pero de la cual no es lícito salir. ¿Qué dice el Corán de esto? Hay 14 versículos en él que tratan de la apostasía, 13 de ellos hablan de «un castigo muy doloroso en el otro mundo», solamente la azora del Arrepentimiento IX, 75 dice, refiriéndose a los apóstatas, que «Dios los atormentará con un tormento doloroso en este mundo y en la última vida: no tendrán en la tierra amigo ni defensor». Esto ha sido interpretado por la tradición preponderante y por las corrientes radicales actuales como que al apóstata hay que aplicarle la pena de muerte. Además, en las sociedades islámicas –no se olvide que son teocráticas–, el que se pasa a otra religión o se hace ateo pierde en sustancia sus derechos, porque la depositaria de ellos es la comunidad y no el individuo; éste goza de los mismos en cuanto miembro de dicha comunidad, lo que no deja de presentar un gran parecido con los nacionalismos. En el cristianismo, por el contrario, es la persona como tal la titular de los derechos. En algunas de estas sociedades, incluso el código penal tipifica el delito de apostasía, penándolo con la muerte.
Apostasía. (Del lat. apostasĭa, y este del gr. ἀποστασία).1. f. Acción y efecto de apostatar.
Apostatar. (Del lat. apostatāre).1. intr. Negar la fe de Jesucristo recibida en el bautismo.2. intr. Dicho de un religioso: Abandonar irregularmente la orden o instituto a que pertenece.3. intr. Dicho de un clérigo: Prescindir habitualmente de su condición de tal, por incumplimiento de las obligaciones propias de su estado.4. intr. Abandonar un partido para entrar en otro, o cambiar de opinión o doctrina.
«La raíz del mal está inscrita en un islam que es fisiológicamente violento e históricamente conflictivo». La fe no puede imponerse sino que es un ejercicio de la libertad, porque Dios no quiere esclavos a su servicio sino hijos que le amen. Todos debemos haber aprendido definitivamente que: la fe es propuesta, nada más.
El corán establece claramente una discriminación entre los musulmanes, que deben dominar, y los no musulmanes, que deben someterse»…
Lo más chocante es el delirio paranoico contra los judíos. El odio contra los judíos está presente en todo el Corán: “Malditos sean, allá donde se encuentren, serán cogidos y caerán en la matanza”» (Sura XXXIII, 61).
Mahometanos – Puede el Islam ser autocrítico? ¿Pueden sus líderes condenar y marginar a los extremistas, o está condenados los musulmanes a ser rehenes de las pasiones de aquellos que consideran el asesinato de inocentes un acto agradable a Dios? ¿Puede Occidente recuperar su compromiso con la razón y así ayudar a los reformadores del Islam?
Lo que los tópicos progres nunca le han contado sobre la civilización más avanzada de la historia: la nuestra ‘europea y cristiana’.
“Las cuatro escuelas de Ley sunnita, así como las de carácter shiíta, coinciden en que debe aplicarse la pena de muerte por apostasía. En los países en los que impera la Sharia o ley islámica como Irán, Arabia Saudita, Afganistán, Pakistán, Sudán y Mauritania, la pena de muerte para quienes abandonan el Islam suele ser aplicada”.
La ley de «hisba», es un antiguo reglamento islámico que permite a cualquier persona acusar a otra si considera que sus actos pueden ser perniciosos para la sociedad.
No se trata de que cohabiten musulmanes y cristianos en un mismo territorio, sino si es posible una sociedad democrática con una numerosa población musulmana. 2004 Alfonso García Nuño.
Un verdadero musulmán (con los sinónimos mahometano-islámico), no puede aceptar la igualdad entre hombre y mujer, pues el Corán, que es la pura palabra de Dios, dice expresamente que la mujer es inferior al hombre (consultar la aleya 34 de sura IV).
De hecho, pedir a un musulmán que se integra totalmente en nuestra sociedad es prácticamente invitarle a que abandone su fe religiosa; fe que no admite diferencia entre lo temporal y lo espiritual. Es evidente que un creyente musulmán no va a renunciar a lo que dice Dios por una ley dictada por unos humanos que son, además, infieles. La integración implica, para el musulmán, simplemente apostasía, acto que se castiga en el islam con la pena de muerte, y la ejecución del renegado puede realizarla todo buen musulmán si se encuentra con el apóstata. Incitar a un musulmán a la plena integración puede llegar a ser, en algunos casos, como invitarle al suicidio.
Recomendamos vivamente un libro fundamental ‘Islam para adultos’ Autor: Antonio López Campillo. Prólogo del doctor César VIDAL -Editorial ‘Adhara publicaciones’.
¿Cuantos mas ejemplos hay que poner?, la cosa está bien clara, EL ISLAM ES INCOMPATIBLE CON LA CIVILIZACIÓN, ASÍ DE CLARO, y por lo tanto, DEBE SER ILEGALIZADO.
Desde la prohibición de afeitarse la barba al velo femenino obligatorio, desde el cierre de las escuelas para la mujer a la amputación como castigo de los ladrones, desde el apaleamiento de los fornicarios a la lapidación de las adúlteras, los talibán* «amantes de la sharía» se han convertido en un enclave en pleno siglo XXI de leyes inicuas y contrarias a toda equidad, enunciadas por Mahoma en el s. VII d. de C.
*[talibán hoy podemos llamar a todo mahometano que obliga imponer la sharia, mismo a las personas que no acreditan ni aceptan tales principios despóticos, contrarios a la declaración de los derechos del hombre].
El mahometismo (islam) conduce al oscurantismo de una ideología que legitima la mentira y el disimulo, la muerte violenta que induce al homicidio y al suicidio, la ciega sumisión a la tiranía. ¿Dónde están los musulmanes llamados ‘moderados’ para proteger a los cristianos y judíos en tierras donde ya quedan pocos por exterminio o ahuyentamiento?.-
Mas nos vale dejarnos de zarandajas «progres» con eso de la «tolerancia» (que no es tal, su verdadero nombre debería ser «TONTORANCIA» aunque no aparezca en el diccionario) y exigir a nuestros estupidos políticos que se dejen de soplapolleces y miramientos con estos bárbaros del siglo XXI.
SEÑORES POLÍTICOS Y SEÑORES «PROGRES», EN NUESTRA CIVILIZACIÓN OCCIDENTAL:
Con la evolución de nuestras sociedades, el perro ha pasado de ser el mejor amigo del hombre a ser el peor enemigo del vecino. Y ser enemigo del vecino, es ser enemigo de la urbanidad, porque la urbanidad básicamente, es vecindad, convivencia”, señala Mo’ámmer al-Muháyir en Web Islam, una página islámica editada en España y protagonista ya de algunas polémicas destacadas, como amenazar a nuestro país con “tener otro 11-M”, a través de uno de sus principales articulistas, como consecuencia del apoyo del Gobierno de Zapatero a la guerra de Libia.
El autor del opúsculo anticanino, un converso residente en Argentina, propaga un exaltado y feroz ataque contra la convivencia doméstica de estos animales, similar a las invectivas lanzadas hace unos meses para prohibirles el paso a determinados espacios públicos.
El autor del infamante artículo recurre a algunos pasajes coránicos que validarían sus opiniones contra estos entrañables animales. “Hace algo más de 1400 años, hubo en Arabia un Profeta (Mahoma) que nos habló sobre los perros: “Quien que tenga un perro, salvo que sea para pastoreo, la caza o la crianza de animales de campo, perderá la complacencia y la bendición de Dios cada día que lo tenga, tanto como una montaña (qirat)”. “El Profeta Muhámmad (P y B) afirmó que todo aquel que tenga un perro en su casa le será negada la bendición de la presencia de los ángeles en su hogar, pues dijo: ‘Los ángeles no entran en una casa en la que hay un perro’”. “El perro es un animal impuro, y la impureza está en su hocico. Si un perro lame un plato o una vasija, debe lavarse una vez con tierra y siete veces con agua”.
El articulista de Web Islam desgrana larga y atropelladamente los orígenes y causas de la domesticación del perro, desde la época primitiva hasta la babilónica, para conferirle un papel de conveniencia económica para el hombre justo hasta la llegada de la revolución industrial. Preferimos que extraigan ustedes sus propias conclusiones a partir del desquiciado relato que reproducimos: “La Revolución Industrial da a luz un modelo de sociedad radicalmente distinto, donde el campesino se transforma en obrero. El campesino necesita campo, y el obrero, necesita fábrica. El campesino vive donde trabaja, su casa está en el campo, sea propio o ajeno. Vive en paz escuchando los cantos de los pájaros, y no ve gente muy a menudo. Por eso cuando ve a alguien, saluda y sonríe; está contento de ver a su vecino. Pero el obrero no puede vivir donde trabaja, porque el dueño de la fábrica tiene el único objetivo de hacer dinero con ella, no de construir una sociedad para sus operarios (…). De repente, el campesino que ahora es obrero, está harto de ver gente todos los días, y de los problemas de convivencia que acarrea vivir demasiado juntos en tan poco espacio. Y por eso está siempre de mal humor y ya no sonríe. Semejante estilo de vida sería una locura para cualquiera, pero hay un incentivo demasiado fuerte: se espera que el obrero, vendiendo su fuerza de trabajo, obtenga más dinero que el campesino y compense el malestar y hacinamiento de las ciudades con algo más, comprando riquezas. Algo como por ejemplo… un televisor.
La alienación ha entrado en esta instancia en un punto sin retorno, en un círculo vicioso que desemboca, indefectiblemente, en la destrucción de los lazos sociales urbanos y en el irremisible aislamiento del individuo ante la sociedad. Ya no convivimos; nos toleramos. Y no te acerques demasiado, porque tengo un perro.
En estas condiciones, todos esperamos que el perro haga el trabajo sucio que nosotros fuimos incapaces de arreglar: darnos el cariño que ya no podemos obtener de nuestros vecinos; y ahora que hay televisor, computadora y Play Station, que no pueden darnos ni siquiera nuestros familiares, porque están muy ocupados. El obrero vuelve del trabajo, y encuentra a su esposa viendo televisión con aire displicente y a su hijo absorto jugando a la Play Station, cada uno en cuartos separados. La lógica de la división compartimentada que la moderna sociedad industrial le impuso al recién llegado a la gran ciudad, se trasladó del edificio al seno del hogar. Cada uno está aislado en lo suyo. Lo saludan casi sin mirarlo, en la mayoría de los casos. Entonces el obrero se abraza al perro. De repente, el perro es maravilloso: lo mira a los ojos, mueve la cola, se siente feliz de verlo. De hecho, quizás sea el único que se siente feliz de verlo… porque sabe que le darán de comer. El obrero sabe esto, pero está tan necesitado de contacto físico que se miente a sí mismo (…). En esta instancia, el perro es el testaferro de nuestra fracasada vida afectiva y civil, pues recibe el cariño que nuestra mezquindad y temor nos impide darle a nuestros semejantes. De repente, en nuestras sociedades industriales, darle de comer a un perro de la calle es ‘humanitario’, pero darle de comer a un indigente o a un chico de la calle es peligroso, porque esa gente de la calle ‘son unos perros’. De esta forma, la misantropía y el odio a nuestros semejantes se disfraza de ternura. La pasión occidental por peinar y mimar perros mientras los huérfanos fuman y lustran zapatos en nuestras calles ante la puerta de los prostíbulos, es una prueba evidente de que nuestras sociedades industriales están más cerca de la zoofilia que de la filantropía. Por eso mimamos perros: porque somos incapaces de relacionarnos normalmente con otros seres humanos, de dar amor y de recibirlo como Dios manda. Si observamos a nuestro alrededor, veremos que cuanto más desconfiada y xenófoba es una sociedad, mayor es la población de perros” (sic).
Mo’ámmer al-Muháyir continúa ‘diseccionando’ el miserable mundo de los occidentales a través de los ojos de nuestras mascotas, a las que acusa de acumular ” tensiones y descargarlas contra los más débiles”. Y otra vez del delirio a la praxis para apuntalar su descabellada teoría: “Eso puede notarse, por ejemplo, cuando vemos que los perros encerrados se ‘entretienen’ ladrando y asustando a los transeúntes, es decir, perjudicando y estropeando la convivencia entre vecinos, que como vimos, en las sociedades industriales llega hasta el paroxismo. Uno podría preguntarse: si el perro es un animal de costumbres, ¿no se acostumbra a ver pasar todos los días al mismo vecino? ¿Por qué cada vez que el vecino pasa, le ladra y lo asusta? La respuesta es que están aburridos. Los hemos sacado de los campos y los hemos encarcelado detrás de rejas para que ‘cuiden’, ya no nuestros campos y cosechas, sino nuestro diminuto patio, por nuestra pinche paranoia y nuestro empecinamiento mediocre y enfermizo de ver en cualquier transeúnte que pasa por la puerta de nuestra casa, a un ladrón potencial”.
También interesará conocer al lector que, según interpreta nuestro nunca bien pobderado converso patagónico, los perros mimetizan a la perfección los peores roles sociales. “En una sociedad donde el pez grande se come al chico y el abuso de los débiles es la norma, los perros simplemente copian y reproducen el comportamiento de sus dueños: yo he visto en mis innumerables viajes a dedo, en varias plazas y calles de Latinoamérica, a perros callejeros asustando y aterrorizando niños hasta hacerlos llorar y correr de pánico, nomás por diversión, sin llegar nunca a morderlos. Recuerdo a un niño llorando y corriendo aterrorizado por una solitaria plaza de Tilcara, en la Quebrada de Humahuaca, perseguido por un gran perro, que cuando lo alcanzó apenas lo empujó con sus patas delanteras en la espalda, y luego se fue satisfecho, con aire triunfador (…). Los perros, como todos los canes y mamíferos gregarios, son muy sensibles a la lógica del sometimiento por la fuerza y el vasallaje. Para ellos no hay relación de iguales; o los sometes o te someten a ti. Esta es una gran verdad sobre el carácter de estos animales. Es también muy común ver cómo los perros asustan a los caballos en los barrios rurales, que son instintivamente muy sensibles a los depredadores y se asustan con facilidad, y aún a sí están obligados a dominar su pánico por estar ensillados; o cómo persiguen a los ciclistas en las ciudades para morderles los talones, sólo por diversión”.
Acaso sin pretenderlo, lo que hace el autor en otro apartado de su relato es acentuar la inteligencia de los canes, al estar orientada según él a la consecución mediante la lógica de un objetivo específico. Lo expresa en este otro ‘conmovedor’ relato de la vida doméstica: “Cuando un perrito callejero llega a nuestra casa, mientras nuestro hijo y nuestra esposa nos jalan de la ropa insistiéndonos que se quede y nosotros pensamos en la caca y las pulgas, un pariente entra a nuestra casa de imprevisto, y el perrito, que no tiene todavía 15 minutos en la casa y no conoce los movimientos, se abalanzará sobre él a ladrarle como lo haría con un intruso, hasta que le demos una palmada en el lomo y le digamos que está todo bien, que es un amigo. Con esta actitud, el perro nos está diciendo claramente: ¿Ves? Yo te cuido la casa, ¿me puedo quedar? De esta forma, el perro sabe que esperamos algo de él, y si percibe que nosotros odiamos o despreciamos a un vecino en particular, se enconará especialmente contra esa persona. Naturalmente, a la gente envidiosa, mediocre y cobarde, esta cualidad del perro les encanta. Los perros son muy sensibles a nuestros cambios de adrenalina, y percibirán fácilmente si al ver pasar a un transeúnte por la calle, sentimos miedo y desconfianza, y acusarán recibo de ello ladrándole a esa persona que tememos en particular. Esto sucede muy a menudo, especialmente con la gente mayor que tiene perros, y se siente sola y desprotegida… en una palabra, abandonada por la sociedad, por una sociedad donde los ancianos no son venerados ni respetados como antaño”. Pues hay que ver lo que aprende uno con estos islamitas moldeados con la peor madera.
La argumentación del articulista alcanza su paroxismo máximo al desgranar con otro ejemplo familiar la conexión entre la especie canina y las dictaduras católico-fascistas. De entrada, el autor recrimina a los perros su actitud ecléctica ante “los verdaderos conflictos humanos”. Ignoramos si se refiere a la actitud contemplativa y poco eficiente de nuestros animales de compañía ante la proliferación de productos eugenésicos, el terrorismo fanático, los escalofriantes informes de las agencias de calificación de riesgos o la desertificación del planeta. “Mi madre, por ejemplo”, nos relata, “tenía una perra que ladraba incesantemente cada vez que una visita tocaba el timbre, quizás la misma todas las semanas, a la misma hora. Hacía tanto escándalo que había que pegarle una palmada en el lomo y gritarle para que se callara, o de lo contrario era imposible escuchar quién nos hablaba por el portero eléctrico. En una oportunidad, un vecino llamó a la policía diciendo erróneamente que un ladrón se había metido en nuestra casa. Dio la casualidad de que la puerta del pasillo trasero estaba abierta, así que varios oficiales llegaron por la noche… y entraron en la casa con linternas. No hay nada que mi madre odie y tema más que a la policía. Al fin y al cabo, fueron quienes la secuestraron y torturaron en la clandestinidad durante la última dictadura militar católico-fascista. Cuando mi madre se despertó viendo las luces de las linternas en la noche, se puso a gritar desesperada, intentando echar a los policías, insultándolos y sin darles tiempo a explicar nada. Finalmente, logró saber que el inquilino había llamado a la policía… y se fue hacerle un terrible pleito, y lo echó de inmediato. Cuando el conflicto pasó, se preguntó, ¿dónde está Melina, la perra? ¿Por qué no ladró, por qué no salió? Melina, estaba escondida debajo de la cama sin hacer un solo ruido. La única vez que se necesitaba que ladrara, no ladró; y sin embargo, cada día molestaba a todos con sus ladridos, haciéndonos creer que era capaz de cuidar la casa y advertir la entrada de un intruso”.
Mo’ámmer al-Muháyir lamenta por último que los perros que viven en Occidente tengan “más derechos y libertades que nosotros mismos”. Un epílogo que define muy bien cuál es la estructura mental sobre la que se cimenta la lógica islámica. Recurre a otro caso personal el colaborador de Web Islam para desbrozar su aseveración: “En nuestras ciudades y barrios, el ladrido incesante y acusativo (sic) de un perro es una forma de agresión sonora y de abuso más común, tanto de día como durante las necesarias horas de sueño durante la noche. Y tristemente, está aceptada como normal en nuestras sociedades latinas. En una ocasión, discutí con un vecino y me quejé porque su perro tenía la fea costumbre de darme terribles sustos cada vez que yo pasaba con mi esposa por la acera pública, mientras conversábamos distraídamente. Le dije: ‘Tu perro me causa un perjuicio, porque me asusta, me pone de mal humor, se me acelera el corazón y siento enojo; además de que no puedo conversar por el escándalo de los ladridos, ¿qué derecho hay a que yo tenga que pasar por esa fea experiencia todos los días, cuando lo único que hago es ejercer mi derecho a transitar por la vía pública?’.
El vecino me respondió con soberbia, como era de esperar: – “El perro no te puede hacer nada, está en mi propiedad”.
A lo que yo le respondí con argumentos razonables, como era de esperar: – “Está bien, veamos qué piensa usted de ésto: cada vez que su esposa pase por la puerta de mi casa, yo saldré de atrás de los arbustos con una máscara horrible y un gran cuchillo untado con salsa de tomate, y me pondré a gritar como desaforado caminando de un lado al otro de la cerca, simulando que estoy buscando un hueco para saltar la cerca y poder agarrar a su esposa del cuello y apuñalarla. Pero ojo: en realidad no le voy a hacer nada. Y estaré en todo mi derecho, y usted no podrá quejarse, porque en realidad, nunca saltaré la reja, siempre estaré dentro de mi propiedad. ¿Qué le parece?”.
Está claro que, a la luz de este testimonio, lord Byron modificaría con gusto su feliz y elocuente frase: “Cuanto más conozco a cierta clase de gente, más quiero y respeto a mi perro”. Amén.
Existe una aceptación generalizada, hasta el punto de convertirse en axiomática, de que el castigo corporal islámico a las mujeres es de orden cultural, que no deriva del Corán y que actualmente el islam ofrece a las mujeres una vida mejor de la que pueden disfrutar en Occidente.
[…] Leila Ahmed, profesora de estudios sobre las mujeres y la religión en Harvard, [ha declarado]: «Me sorprende hasta qué punto la gente piensa que Afganistán y los talibanes representan a las mujeres y al islam». Ahmed dice: «Nos encontramos en las primeras etapas de un gran replanteamiento del islam para su apertura hacia las mujeres. [Los expertos musulmanes] están efectuando una relectura de los textos sagrados del islam, desde el Corán hasta los textos legales, en todas sus posibles alternativas».
Relecturas
(…) La «relectura» del Corán y de otros textos sagrados del islam, ¿va realmente a contribuir a «una apertura del islam hacia las mujeres»? Éstos son algunos de los textos de los que habría que efectuar una «relectura»:
– Las mujeres son inferiores a los hombres, y deben ser gobernadas por éstos: «Los hombres tienen autoridad sobre las mujeres porque Alá los ha hecho superiores a ellas» (Corán, 4: 34).
– El Corán compara a la mujer con un campo (tierra cultivable) a ser usado por el hombre según su voluntad: «Vuestras mujeres son vuestro campo de cultivo; id, pues, a vuestro campo de cultivo como queráis» (2: 223).
– También declara que el testimonio de una mujer vale la mitad que el de un hombre: «Y llamad para que sirvan de testigos a dos de vuestroshombres; y si no encontráis dos hombres, entonces, un hombre y dos mujeres que os parezcan aceptables como testigos, de modo que si una yerra, la otra subsane su error» (2: 282).
– Permite a los hombres casarse con hasta cuatro mujeres, y también tener sexo con esclavas: «Y si teméis no ser equitativos con los huérfanos, entonces casaos con otras mujeres que os sean lícitas: dos, tres o cuatro; pero si teméis no ser capaces de tratarlas con equidad, entonces sólo con una, o con aquellas esclavas que sean de vuestra propiedad. Esto hará más probable que no os desviéis de la rectitud» (4: 3).
– Ordena que la herencia de un hijo debe ser el doble que la de una hija: «Con relación a la herencia de vuestros hijos, Alá os prescribe lo siguiente: al varón le corresponde el equivalente a la porción de dos hembras» (4: 11).
– Indica a los maridos que golpeen a sus esposas desobedientes: «Las mujeres virtuosas son las verdaderamente devotas, que guardan la intimidad que Alá ha ordenado que se guarde. Pero a aquellas cuya animadversión temáis, amonestadlas, y luego dejadlas solas en el lecho; luego pegadles» (4: 34).
Aisha, la más amada de las numerosas esposas de Mahoma, amonestó a las mujeres en forma muy clara: «Oh, mujeres, si conocierais los derechos que vuestros maridos tienen sobre vosotras, entonces cada una de vosotras limpiaría el polvo de los pies de su marido con su cara».
Puede ser que individualmente los musulmanes respeten y honren a las mujeres, pero el islam no lo hace.
(…)
El matrimonio infantil
El Corán da por sentada la existencia del matrimonio infantil en sus directivas sobre el divorcio. En las consideraciones acerca del periodo de espera requerido para determinar si la mujer está encinta, dice: «En cuanto a aquellas de vuestras mujeres que han pasado la edad de la menstruación, y aquellas que no la tienen, su período de espera será de tres meses» (Corán, 65: 4; la cursiva es mía). En otras palabras, aquí Alá está previendo un escenario donde la mujer prepúber no solamente está casada, sino en el cual su marido se divorcia de ella.
Una razón de la «revelación» de este versículo a Mahoma es que él mismo tenía una esposa niña: el Profeta «se casó con Aisha cuando ella era una niña de seis años, y él consumó ese matrimonio cuando ella tenía nueve años». Los matrimonios infantiles eran habituales en Arabia durante el siglo VII, y aquí nuevamente el Corán ha retomado una práctica que debía haber sido abandonada hace tiempo, otorgándole el carácter de una revelación divina.
El castigo corporal a las mujeres
Una vez se le dijo a Mahoma que «las mujeres se habían envalentonado con sus maridos», por lo cual él «concedió el permiso para que las golpearan». Cuando algunas mujeres se quejaron, Mahoma señaló: «Muchas mujeres han acudido a la familia de Mahoma para quejarse de sus maridos. Ellas no son de las mejores entre vosotras». Estaba disgustado con las mujeres que se quejaban, y no con los maridos que les pegaban. En otro momento, agrega: «A un hombre no se le debe preguntar por qué pega a su mujer».
Otro hadiz relata que en una ocasión una mujer acudió a Mahoma para pedir justicia. «Aisha dijo que la mujer [vino] usando un velo verde, [y se quejó a Aisha de su marido, y le mostró una mancha verde en su piel causada por golpes]. Entre las mujeres, era una costumbre el respaldarse mutuamente, por lo cual cuando llegó el Mensajero de Alá, Aisha dijo: ´Nunca he visto sufrir tanto a una mujer como a las mujeres creyentes. ¡Mira! ¡Su piel está más verde que su ropa!´».
(…)
Una oferta que no se puede rechazar
Mahoma destacaba el hecho de que las mujeres eran posesiones de sus maridos: «El Mensajero de Alá dijo: ´Si un marido convoca a su mujer a su cama [para tener relaciones sexuales] y ella se niega y provoca así que él se duerma enfadado, los ángeles la maldecirán hasta la mañana siguiente´». Esto se ha mantenido en la ley islámica: «El marido solamente está obligado a mantener a su mujer cuando ella se entregue o se ofrezca a él, lo que significa que le permita gozar en forma absoluta de su persona, y que no se niegue a tener sexo con él en cualquier momento del día o de la noche».
No deben salir solas
La ley islámica estipula que «el marido puede prohibir a su mujer salir de su casa», y que «una mujer no debe abandonar la ciudad sin estar acompañada por su marido o por algún miembro de su familia política, a menos que el viaje sea obligatorio, como el haj [la peregrinación a La Meca]. En otras circunstancias, es ilegal que ella viaje, o que el marido le permita hacerlo».
Según Amnistía Internacional, en Arabia Saudí «las mujeres […] que caminen sin compañía, o que vayan en compañía de un hombre que no sea su marido ni tampoco un pariente cercano, corren el riesgo de ser arrestadas bajo sospecha de prostitución o de otras ofensas morales».
Maridos temporales
Para un hombre musulmán no hay nada tan sencillo como el divorcio. Todo lo que tiene que hacer es decirle a su mujer: «Me divorcio de ti», y el divorcio queda consumado. La aparente crudeza de esta disposición pareciera estar mitigada por este versículo del Corán: «Y si una mujer teme ser maltratada o abandonada por su marido, no incurrirán en falta si ambos se avienen a reconciliarse pacíficamente: pues lo mejor es la reconciliación» (Corán, 4: 128). Pero esta apelación al acuerdo no es un llamamiento a un encuentro entre iguales, al menos tal como es interpretado por la Hadiz. Aisha explica este versículo: «Se refiere a la mujer cuyo marido ya no quiere conservarla, sino que quiere divorciarse de ella y casarse con otra, y entonces ella le dice: ´Quédate conmigo y no te divorcies, y cásate con otra mujer, y no tienes que mantenerme ni dormir conmigo´».
La posibilidad de que un hombre se divorcie de su mujer en un rapto de ira y luego quiera reconciliarse con ella da pie a otra originalidad de la ley islámica: una vez que una mujer musulmana se ha divorciado tres veces del mismo marido, debe casarse y divorciarse de otro hombre antes de poder volver con el primero: «Cuando un hombre libre se ha divorciado tres veces, es ilegal que se vuelva a casar con la misma mujer antes de que ella se haya casado con otro en un matrimonio válido, y que el nuevo marido haya copulado con ella».
(…)
Esta indicación ha dado origen al fenómeno de los «maridos temporales». Después de que un marido se divorciara de su mujer en un arranque de resentimiento, estos hombres iban a «casarse» con la infortunada divorciada por una noche para permitirle volver con su marido y su familia.
Licencia profética
Cuando Mahoma ya tenía nueve esposas y numerosas concubinas, Alá le otorgó un permiso especial para tener tantas mujeres como quisiera: «¡Oh Profeta! Hemos hecho lícitas para ti a tus esposas, a las que has pagado sus dotes, así como a las que tu diestra mano posee procedentes del botín de guerra que Alá te ha concedido. Y [hemos hecho lícitas para ti] a las hijas de tus tíos y tías paternos, y a las hijas de tus tíos y tías maternos que hayan emigrado contigo [a Yazrib], y a cualquier mujer que libremente se ofrezca al Profeta y con la que el Profeta quiera casarse, esto sólo como privilegio tuyo, no de los demás creyentes» (Corán, 33: 50). Estas profecías tan convenientes son numerosas en el Corán; Alá incluso ordena a Mahoma que se case con la atractiva esposa divorciada de su hijo adoptivo (33: 37).
El deseo de Mahoma ha cosechado amargos frutos. Estos pasajes del Corán son sólo dos ejemplos de la profunda convicción de que las mujeres no pueden ser iguales a los hombres en cuanto a su dignidad como seres humanos, sino que son objetos concedidos a los hombres y usados por éstos. La poligamia, desde luego, está basada en esta suposición, y se va trasladando hacia el Oeste con el islam. La poligamia ha pasado a ser tan común entre los musulmanes de Gran Bretaña, que a finales de 2004 los británicos consideraron su reconocimiento a los efectos de la aplicación de los impuestos.
Esposas temporales
El islam chiita, (…) dominante en Irán, también permite tener «esposas temporales». Esto es una provisión para los hombres que quieren tener una compañía femenina por un corto periodo de tiempo. En un matrimonio temporal, o mut’a, la pareja firma un acuerdo matrimonial que es el habitual en todos los demás aspectos, salvo que incluye un límite de tiempo para el mismo. Una tradición de Mahoma estipula que un matrimonio temporal «debería durar tres noches, y si ellos quieren continuar pueden hacerlo, y si se quieren separar, también». No obstante, muchas de estas uniones no llegan a durar las tres noches.
La autorización de esta práctica se basa en una variante chiita de la lectura de un versículo del Corán (4: 24), así como (…) en este párrafo de los hadices: «Jabir ben Abdulá y Salama ben al-Akwa han relatado: cuando estábamos en el ejército, el Mensajero de Alá vino a nosotros y dijo: ´Vosotros tenéis la autorización para el mut’a (…), por lo tanto, realizadlo´». Los musulmanes sunníes, que constituyen el 85% del total, proclaman que luego Mahoma revocó esta provisión, pero los chiitas no están de acuerdo con esa medida. De todos modos, las esposas temporales tienden a congregarse en las ciudades sagradas chiitas, donde pueden ofrecer compañía a los seminaristas solitarios.
Violación: se necesitan cuatro testigos
La mayor amenaza para las mujeres reside en la concepción musulmana de la violación, en la medida en que se conjuga con las restricciones islámicas respecto a la validez del testimonio femenino. En un juicio, el testimonio de una mujer vale la mitad que el de un hombre (Corán, 2: 282).
Los teóricos de la ley islámica han restringido aún más la validez del testimonio femenino al limitarlo, en palabras de un manual legal (…), a «casos relativos a la propiedad o a transacciones referidas a propiedades, tales como las ventas». En otros casos solamente pueden testificar los hombres. En los casos de abuso sexual, se requieren cuatro testigos. Éstos deben poder aportar otros elementos aparte de la mera testificación de que se ha producido un hecho de fornicación, adulterio o violación; en este último caso, deben haber sido testigos presenciales.
Esta disposición tan peculiar como demoledora tiene su origen en un incidente de la vida de Mahoma, cuando su esposa Aisha fue acusada de infidelidad. La acusación conmocionó especialmente a Mahoma, porque Aisha era su esposa favorita. Pero en este caso, como en muchos otros, Alá acudió en ayuda de su Profeta, le reveló la inocencia de Aisha e instituyó la estipulación de los cuatro testigos requeridos para los pecados sexuales: «¿Cómo es que no presentan cuatro testigos para probar su imputación? Pues, ¡si no presentan dichos testigos, son ésos los que, ante Alá, son en verdad mentirosos!» (Corán, 24: 13).
Por consiguiente, es casi imposible probar una violación en los territorios que siguen los dictados de la sharia. Los hombres pueden cometer una violación con total impunidad: si niegan los cargos y no hay testigos, serán absueltos, porque el testimonio de la víctima es inadmisible. Peor aún, si una mujer acusa a un hombre de violación puede terminar incriminándose a sí misma. Si no se pueden encontrar los testigos masculinos requeridos, la acusación de violación de la víctima pasa a ser una admisión del adulterio. Esto explica el grave hecho de que hasta el 75% de las mujeres encarceladas en Pakistán lo están por el crimen de haber sido víctimas de una violación.
(…)
La circuncisión femenina
(…) no es una costumbre específicamente islámica, dado que existe en una cierta cantidad de grupos culturales y religiosos de África y del sur de Asia. Entre los musulmanes, prevalece principalmente en Egipto y su entorno. A pesar de que, en el mejor de los casos, hay escasas referencias a esta horrible práctica en el Corán o en los hadices, los musulmanes que la practican la revisten de un significado religioso. Un manual legal islámico establece que la circuncisión es requerida «tanto para los hombres como para las mujeres».
Para el jeque Mohamed Sayed Tantawi, el gran jeque de Al-Azhar, la circuncisión femenina es «una práctica loable que honra a las mujeres». En su carácter de gran imán de Al-Azhar, Tantawi es, según palabras de un periodista de la BBC, «la mayor autoridad espiritual de casi mil millones de musulmanes sunníes». Quizás a los ojos del jeque Tantawi el dolor que causa a sus víctimas la circuncisión femenina bien vale el resultado; la mayor parte de las autoridades concuerdan en que la circuncisión femenina está diseñada para reducir la respuesta sexual de la mujer, de modo tal que sea menos propensa a cometer adulterio.
Las perspectivas a largo plazo no son nada halagüeñas
Mientras los hombres continúen leyendo y creyendo en el Corán, las mujeres van a ser ciudadanas despreciadas de segunda clase, sujetas a la angustia y la deshumanización de la poligamia, a la amenaza de un divorcio fácil y arbitrario; y, lo que es aún peor, van a estar sometidas a golpes, a falsas acusaciones y a la pérdida de la práctica totalidad de las libertades humanas más elementales.
No se trata de fenómenos que se den en un grupo o en un partido, ni de forma efímera. Son las consecuencias de considerar el Corán como la palabra absoluta, perfecta y eternamente válida de Alá. En la medida en que los hombres sigan creyendo firmemente en el Corán, las mujeres estarán en peligro.
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NOTA: Este texto es un fragmento editado del capítulo 5 de GUÍA POLÍTICAMENTE INCORRECTA DEL ISLAM (Ciudadela), de ROBERT SPENCER, titulado «El islam oprime a las mujeres».