Un tipo va al psiquiatra y le dice que sufre de un terrible trilema.
El psiquiatra, bastante extrañado le dice que hasta donde él conoce, sólo existen los dilemas, y le explica que el dilema se presenta cuando uno se encuentra frente a dos alternativas, y no sabe cual es la mejor, o cuál elegir, por ejemplo:
– Usted no sabe si ir al cine o al estadio, no sabe si ir al gimnasio o a correr.
El paciente le pide que le permita explicarle lo que él considera un trilema:
– Verá doctor, mi vecino me debe un dinero desde hace tiempo y yo todas las mañanas voy a cobrárselo.
Cuando llamo a la puerta de su casa sale su esposa, una muchacha rubia, hermosa, con un camisón totalmente transparente y sin nada debajo, me saluda muy efusivamente, me toma de la mano y me lleva hasta su cama donde deja caer su camisón quedando totalmente desnuda. Seguidamente empezamos a hacer el amor, y cuando estamos en lo mejor, sale de debajo de la cama mi vecino, que es un negro grandote, y me penetra analmente, y eso ocurre todos los días que voy a cobrarle mi dinero.
El psiquiatra lo mira sorprendido, y le pregunta:
– ¿Dónde está el trilema?
El paciente le dice:
– Precisamente doctor ahí está mi trilema, porque yo ya no sé a que voy a la casa de mi vecino, si a cobrarle el dinero que me debe, si a tirarme a su esposa, o a que me folle el negro.